El evento se realizó en la provincia de San Juan desde el sábado hasta el lunes pasado. Se cree que asistieron cerca de 20 mil personas entre ellas algunas lavallinas. Hubo ataques a colectivos que volvían del evento que terminaron con mujeres heridas.

Como anunciamos en nuestra edición impresa el pasado domingo 24 la vecina provincia fue sede de la XXVIII edición del Encuentro Nacional de Mujeres que cada año. En ella mujeres de todo el país -unas veinte mil según algunos medios- se convocaron para discutir distintas temáticas desde la perspectiva femenina.

La modalidad de trabajo de este tipo de encuentro inaugurado en 1986 en nuestro país es mediante talleres de libre elección que tratan diferentes temas propuestos desde la comisión organizadora o por las mismas asistentes de ediciones anteriores.

En esta ocasión fueron cincuenta los talleres dictados entre los que se pueden citar “Mujeres y violencia”, “Mujeres originarias”, “Mujeres y cooperativas”, “Mujeres y medios de comunicación” y “Estrategias para el acceso al aborto legal, seguro y gratuito”. 

Se le consultó a Matianella Arce, una joven estudiante lavallina que asistió al ENM, si existía una ideología medianamente unánime entre las asistentes o si había disidencias en temas tan polémicos como la legalización del aborto.“No, no, hay posiciones encontradas porque imaginate que es sumamente abierto, son 50 mil mujeres que se encuentran e inevitablemente va a diferencia de pensamiento porque somos diferentes y porque en el Encuentro no hay una ideología definida. Participan mujeres trabajadoras, amas de casa, mujeres de uniones vecinales, de organizaciones políticas o como nosotras que no llevamos una bandera…sino que vamos en representación de nosotras…”  respondió Arce.

Independientemente de este clima de aparente respeto que enunciaba la joven lavallina, se registraron serios incidentes al finalizar esta XXVIII edición del encuentro feminista. Dos colectivos que se dirigían de regreso a la ciudad de La Plata donde viajaban mujeres que habían estado en la convocatoria fue agredido con piedrazos en la ruta a la altura del aeropuerto sanjuanino.

Como resultado de  esto una mujer debió ser hospitalizada por una herida en su ojo y otras resultaron heridas con menor gravedad. Según el sitio Infonews además de los ómnibus platenses hubo otros que tambiñen fueron agredidos sumando un total de siete. Florencia Oroz, una militante social que estuvo en el encuentro, declaró: “Antes que nada los ataques no son al azar. Atacaron los 7 micros en los que viajábamos compañeras que estuvimos en el Encuentro Nacional de Mujeres, que para nosotros representó un hecho político que tocó los intereses particulares, ya sea del gobierno de San Juan, de la Iglesia o de los socios principales de la megaminería, ya que la sede del encuentro tuvo que ver con eso.”

Oroz agregó que responsabilizaban al gobierno de San Juan por lo sucedido ya que «estamos intentando hace varias horas hacer una denuncia en la fiscalía, en la cual no hay nadie, no tiene un turno de guardia, ni nada que se le parezca por lo que no podemos denunciar lo que sucedió por los canales que corresponden. Nos vemos reducidas en nuestra capacidad de acción”  dijo la asistente el lunes a la mañana al sitio periodístico antes citado.

No es de asombrar lo denunciado por Oroz y otras mujeres ya que si bien este Encuentro Nacional de Mujeres trató temas vinculados directamente al género femenino también tocó otros vinculados al bienestar común y derechos ambientales. Específicamente se habló en contra de la megaminería, actividad muy presente en San Juan por medio de la minera canadiense Barrik Gold que ya cuenta con múltiples denuncias en el país, y otra empresa repudiada a lo largo y ancho del planeta como la transnacional de experimentación biogenética Monsanto.