La semana pasada, se debía llevar a cabo el evento de vóley más importante de Lavalle en las instalaciones del polideportivo municipal. Quince equipos de toda la provincia se habían inscripto para esta cita, de casi todos los rincones de la provincia. A tres equipos de otras provincias que querían participar se les tuvo que negar la posibilidad, debido a que eran demasiados inscriptos.
Sin embargo, lo que debió ser una gran fiesta, pensando en impulsar una liga provincial, incluso, se transformó en una inmensa pena, y en una pésima imagen para el departamento.
Departamento que en los últimos años ha venido siendo considerado como uno de los mejor administrados de la provincia, no puede darse el «lujo» de mostrar otra realidad. El polideportivo así, parece mostrar otra imagen completamente diferente. Desde temprano, los equipos de Las Heras, Godoy Cruz, Guaymallén, Luján, Maipú y Junín fueron llegando a tiempo para comenzar un torneo sumamente significativo que llevaba por nombre «Ni una menos». Sin embargo, y a pesar de la predisposición de las autoridades deportivas, el sitio se encontraba completamente inundado. Las lluvias de afuera se trasladaron adentro, lo que motivó la solidaridad de todas para mejorar el estado de las canchas. Cuatro horas después lograron secarla, pero la mitad de los equipos ya se habían retirado. La sensación de solidaridad se transformó en impotencia y frustración. Los esfuerzos de semanas de organización, voluntad y compromiso parecían no tener resultado.
Un problema recurrente que no tiene nada de natural
Desde hace años que el poli se llueve literalmente. Desde misas, hasta cenas de egresados, y desde eventos culturales hasta torneos de distintos deportes han sido «víctimas» de éste, que ya no es un pequeño problema, sino uno muy grande, demasiado grande a estas alturas, cuando comienzan a evidenciarse las grietas que antes tapaban las grandes obras…
Es evidente que hace falta una inversión importante. Ya no son decenas de niños que practican en el polideportivo, sino centenares, que incluso vienen cada vez más de otros distritos del departamento. Es cierto, que los pases de facturas y las internas entre las distintas direcciones coadyuvan a que esto empeore la situación, pero… ¿y la gente? ¿y los niños? ¿y los jóvenes?
Es cierto, que el municipio ah invertido mucho en recurso humano para cubrir las necesidades de los distintos deportes, y también en obras como los playones, también en movilidades y cuotas federativas. No es poco, pero también es cierto que hay nuevas demandas en la sociedad, y necesitan de una planificación y una inversión acordes a los tiempos que corren.