El gobierno de Alfredo Cornejo se jacta de que uno de sus grandes logros es haber instalado el ítem aula. Sin embargo, se olvidó de mencionar que en Mendoza la inflación se disparó de tal manera que alcanzó el 12,4% en sólo 4 meses. Aunque nadie lo crea, sí, el 12,4%, que era la previsión que hacía el gobierno nacional para todo el año. No contento con esa situación, el gobierno provincial juzgó “oportuno” dar un aumento del 15% en tres tramos de 5%. Sin contar con que los docentes y celadores de Mendoza ya venían castigados desde el año pasado, cuando también perdieron salario frente a la inflación.

Era lógico y bien lo sabía el gobierno, que un acuerdo con los educadores mendocinos en esos términos era casi una canallada. Sin embargo, fue más allá, los provocó de tal manera, que no se corrió ni un milímetro en las negociaciones para dar un “ejemplo” a los otros gremios. De esta manera los castigó incluso, dejándolos sin cláusula gatillo, como sí lo hizo con el resto de los gremios estatales. Y encima hace alarde de ello, como “retando a niños que se han portado mal”.

El resultado es una baja de los salarios docentes, ya que se ubicó en el lugar 16 entre los que menos aumentos dieron a sus empleados en los últimos dos años, y ahora peor, ya Mendoza tendrá una inflación que supondrá sobrepasar largamente la meta de inflación de ese 15% anual, que ya parece un chiste, y que en nuestra provincia podría llegar al 30%.

Cabe mencionar que el mes con mayor suba de precios en la provincia fue enero, con un incremento del IPC del 3,7%. En febrero la inflación avanzó 2,6%, en marzo 2,2% y en abril 3,3%.

Como están dadas las cosas, Mendoza, al finalizar el mandato de Cornejo podría relegar a los docentes casi al último lugar en toda la Argentina. Pensar que en Lavalle había prometido mejorarles el sueldo a los trabajadores de la educación, allá por el 2016.
Sólo le alcanzó con el ítem aula. ¡Qué locura!