El jueves 2 de este mes la policía lavallina recuperó tres automotores que habían sido sustraídos ilegalmente en departamentos del Gran Mendoza. Se suman a más de 80 que aún no han sido retirados. Diferencias entre empleados judiciales y policiales.
Los automotores encontrados en el distrito al norte de Villa Tulumaya son una camioneta Toyota Hilux color blanca utilizada para fines comerciales que había sido robada en Guaymallén; un VW Pointer cuya desaparición se había denunciado en Godoy Cruz -ambos «completos» y un VW Golf al cual le fueron retiradas sus cuatro cubiertas, la batería y partes del motor.
Jerarcas de la policía lavallina comentaron que en la dependencia de calle Belgrano hay entre 80 y 90 rodados de cuatro ruedas y cerca de 70 motos. De esta cantidad «la mayoría dependen de la Oficina Fiscal, están en el predio de la policía pero como no se han entregado oficios son responsabilidad de la fiscalía. Hay otros pocos, menos del 10% que han sido traídos por la policía por medio de la Ley de Tránsito, porque les faltaba algún papel o algo semejante y estos salen rápido. El resto es por intervención judicial, de hecho todas las motos son por ellos…»
Es sabido que muchos de estos medios de transporten ya son chatarra, no porque en promedio lleven todos más de cinco años, sino porque hace unos años hubo un incendio que calcinó una gran cantidad de ellos, especialmente motocicletas.
«Esto no es San Agustín»
Los vehículos de los que hablan llegan a estas dependencias por tres vías: infracciones viales, irregularidades técnicas que impiden su circulación o porque son parte de un accidente con heridos o fueron utilizados en un delito (judicializados).
Otra autoridad policial comentó a este medio que la acumulación de estos automotores se debe a la aparentemente excesiva «paciencia» que tendría la fiscalía para devolver los rodados a sus dueños. El uniformado comentó: «No puede ser la cantidad de autos que acumulan y que los ponen a cargo nuestro cuando en realidad esta no es la playa oficial, que está en Capital (San Agustín)»
Por su parte Humberto Panelli, ayudante de fiscal a cargo de la Oficina Fiscal nº7 de Lavalle explicó que cuando se recuperan estos medios de transporte robados: «la división de automotores de la Policía tiene que hacer las pericias técnicas para verificar que el número de chasis y el de motor, y si tiene equipo de GNC, no hayan sido adulterados. Una vez que verifican eso los titulares deben presentar la documentación que acredite la titularidad de los vehículos para poderlos retirar, asimismo que tengan el seguro pago a menos que lo lleven con grúa».
En el caso de los recientes hallazgos en Tres de Mayo, que al cierre de esta edición aun aguardaban en la esquina noreste de la plaza departamental, Panelli aclaró que se están terminando de realizar las pericias y que paulatinamente los propietarios «han ido acercando la documentación».
Un problema «extra lavallino»
En diálogo con otro medio gráfico el director de Seguridad Vial, Oscar Hómola, explicó que con los automotores estacionados en las puertas de las comisarías se pueden llenar dos hectáreas. La playa San Agustín, donde se derivan finalmente los vehículos en custodia estatal, hoy acumula una exorbitante cifra de aproximadamente 19.000 rodados que esperan a sus dueños.
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