Desde hace un tiempo anda dando vueltas por los pagos lavallinos, un inversor de gran calibre que representa a todo un conglomerado de empresas agroalimentarias en el mundo mediterráneo.

Ese mismo inversor, es el que ahora vemos que ha paseado, no sólo por Mendoza, sino por las provincias de San Luis y San Juan proponiendo inversiones millonarias. Es el que salió la semana pasada a proponer hacerse cargo de Vicentín. ¿De Vicentín? ¡Si, parece asombroso!, pero no, Ibrahim Khalifa, ese es el nombre del empresario egipcio, que pidió que «Si Vicentin muestra sus números y está dispuesta a hacer la operación, nuestros directivos de Egipto están la semana que viene listos para firmar», desafió el empresario, según publicó Ambito en su edición del 3 de febrero pasado. Sin embargo, Ambito, que se dedica a temas económicos y financieros agrega: Khalifa desde hace más de un año aparece periódicamente en la prensa hablando sobre proyectos de inversión que rondan los u$s200 millones para instalar plantas deshidratadoras de alfalfa en las provincias de San Juan, San Luis, Mendoza y Santiago del Estero. Por el momento, el grupo egipcio Burhan sólo tiene una oficina comercial en la Argentina y ningún activo. Incluso, en los registros oficiales Burhan International Group Latin América no cuenta con empleados registrados, deuda bancaria ni movimientos societarios. ¿What?

Más adelante, el artículo explicitado sostiene: Lo cierto es que el proyecto de absorción que presenta el empresario egipcio tiene mucho de oportunismo porque busca quedarse con Vicentin sin poner un solo peso, pero a cambio de saldar las deudas con un plan de pagos que tampoco parece demasiado conveniente para sus acreedores porque habla de plazos que van desde los dos a los tres años y medio. A su vez, en el caso de las deudas bancarias se presentarían «avales».

La respuesta final en la city porteña, según del diario nacional, es que este muchacho, de profesión cirujano estaría «vendiendo humo». ¿Será?

Foto: diario Huarpe