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El diario del Oasis Norte de Mendoza

La región hace escuela

10 de abril de 2020

El virus de la desinformación en nuestra salud

  •   Por Antonella Mattioli
           

Por Antonella Mattioli

En tiempos de cuarentena ¿qué tanta importancia le damos a la salud mental?, y cuanto de lo que consumimos en los medios es en realidad productivo y enriquecedor para uno mismo.

El exceso de información o la falta de ella suponen un peligro casi tan grande como el Covid-19. Sucede que, en las redes sociales y los canales de tv, vemos y escuchamos muchas cosas sobre lo que pasa en el mundo. Mantenernos informadxs es casi una necesidad ya que muchas veces nos da la seguridad de cómo actuar o que pasos seguir. Pero ¿qué pasa cuando en nuestros dispositivos comienzan a circular información no chequeada o mal intencionada?

La OMS nos alerta sobre la infodemía, que es la abundancia de información falsa y su rápida propagación. Resulta imprescindible buscar un punto medio entre la información que nos mantendrá en alerta y la que podría llegar a enfermarnos, cuidar la salud mental es tan importante como cuidar de la salud física en épocas de emergencia sanitaria.

Si bien resulta algo difícil llevar a cabo la rutina normal en aislamiento, debemos enfocarnos en nosotrxs mismxs y las personas con quienes compartimos el hogar, por ejemplo. Una manera de hacer frente al exceso de información o a las noticias falsas que circulan en diferentes medios es reducir el uso de redes sociales, mantener la mente ocupada fuera del alcance de la tv, con juegos en familia, bailes, leyendo algún libro que nos encanta y dejamos olvidado en algún rincón.

Parte del miedo que genera esta enfermedad se centra en que es en parte nueva y desconocida tanto para la ciencia como para la medicina, por otra parte, la mala denominación de la misma, este no es un virus chino o ligado a un grupo étnico en particular. Los medios de comunicación tienen mucho que ver en esto y la forma en la que nos transmiten lo que acontece, aquellas personas que contrajeron el virus no son malas y tampoco hicieron algo malo.

Desde la experiencia personal doy certezas de los estragos que pueden causar las cadenas de WhatsApp, las noticias falsas o de procedencia dudosa. Luego de unos días de crisis, miedo y angustia me dispuse a alejarme de las redes sociales como así también de los noticieros y enfocarme en actividades más productivas y provechosas para pasar el aislamiento.

En parte cuidarnos, además de tomar las medidas sanitarias indicadas por el gobierno y el ministerio de salud, también conlleva actuar con responsabilidad en plataformas o redes, chequear la información y mantener la calma, es de suma importancia mantenernos unidos como sociedad y practicar la solidaridad a diario.


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