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El diario del Oasis Norte de Mendoza

La región hace escuela

7 de julio de 2021

Miriam Azzolina, el ninguneo también mata

  •   Por El Despertador
           

Por Lucio Albirosa

“Romperse a doble turno entre pizarrones y la vocación de enseñar hasta que el cuerpo se enferme o partirse en jornadas sin recreo para el cuidado de la vida, son versículos sin atención ni lectura para gobiernos que desgobiernan desmereciendo a toda la ciudadanía, incluidos los docentes. A Miriam le otorgaron un solo día de reposo porque hay doctores que jamás entenderán de sujetos y predicados conjugando oraciones que agonizan cada noche dentro del alma. Oraciones como rezo implorando derechos ante los altares del poder, oraciones gritando en la pancarta extensa que atraviesa noticieros y libera opiniones cruzadas como flechas rumbo a la nada, oraciones escritas con tizas de urgencia, oraciones como campanadas de furia aturdiendo cuadras de manifiesto disconforme a las ordenanzas impuestas y a decretos que maltratan, oraciones doblando en sordas esquinas del ninguneo más cruel, oraciones que vuelven a morir a los pies del desinterés y oraciones observando la nota final, sin calificación posible, para evaluar la desidia del estado.
A Miriam le dieron un solo día de reposo. Necesitaba talvez una semana, un mes. Había enfermado, ya no le importaba el castigo salarial ni los decretos donde te prohíben todo, menos faltar al aula. Estaba desprotegida por el estado. Tenia el rostro maquillado en preocupación y quizás se notó en esos espejos bien llamados amigos, pero hacia adentro de la carne nadie pudo desatar las venas al dolor enredado a merced del destino . En un solo día no se podía curar. Miriam necesitaba acaso todo el mes de octubre, por lo menos, para aliviarse. Tenia obra social, con ella también, obviamente, la garantía del cuidado de su salud, de la atención por parte de profesionales, de medicamentos y hasta de un servicio de ambulancia, por si alguna situación lo requería. Miriam tuvo un accidente cerebrovascular.
En Lavalle, Mendoza, sitio donde la arena y el viento guardan gritos y silencios, ahí esperó Miriam Azzolina la ambulancia por más de dos horas, el tiempo necesario para tomar a veces el rumbo más cruel de los adioses.”

Del libro “La venganza del olvido”, Huentota Ediciones, Mendoza, oct 2019.
Obra artística: “Miriam Azzolina”, Andrés Casciani (artista plástico mendocino)


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