Es concejal desde hace muy poco tiempo y en su agenda están las entidades de todo tipo. Los ideales de la juventud y el pragmatismo de la época.

El Despertador: ¿Qué edad tenés?

Luis Mangione: Yo tengo 39, cumplo 40 en octubre

ED: Tengo una intriga, ¿qué cambió en ese pibe que alguna vez abrazó las ideas del MAJ (Movimiento Amplio de Jóvenes) y este Luis de ahora?

LM: Y, muchas cosas. Creo que quizás con 18 años el pensamiento de lo que uno podía tener en esa edad, ahora con 40 y una hija, son muchos los cambios. Porque siento que uno tiene mucho más coraje cuando es joven que cuando es más grande. También cuando uno es más grande, se da cuenta que hay que pensarlas un poco más a las cosas

ED: ¿A qué cosas te animaste en esa época, que ahora no?

LM: No se, siento que ahora calculo más las consecuencias. Antes de hacer algo lo pensás 2 o 3 veces. Quizás antes uno era más pasional.

ED: Bueno, ¿pero los ideales no son los mismos?

LM: Si, creo que hay como bases ideológicas que siempre se mantienen. Quizás las formas van cambiando, como poder luchar o defender esos ideales, pero me parece que la base ideológica es difícil de cambiarla.

ED: Vos tuviste una experiencia en la biblioteca popular. ¿Qué aprendizajes te dejó esa etapa?

LM: Si, mucho de lo que hago ahora tiene que ver con eso. Una de esas sería el trabajo en equipo siempre trato de mantenerlo. En esa época armamos un grupo de trabajo diverso, de distintos lados, que quizás nunca habían trabajado en una comisión de nada.

ED: ¿Quiénes estaban ahí?

LM: Luis Tallura, Franco Galbani, Raul Escobar, Rocío Maldonado entre otros. Algunos no eran de la comisión pero si parte del equipo.

La horizontalidad también fue parte del trabajo, nunca tuve que imponer una idea, siempre fue el consenso el que ganó. Seguro nos equivocamos en algunas decisiones y en otras no, pero tratábamos de buscar consenso y al mismo tiempo respetar lo que cada uno pensaba.

Entre el 2009 y el 2011 surgieron en Lavalle comisiones de otras bibliotecas, con estas mismas bases si se quiere, y logramos conformar una red y se lograron buenas cosas. Primero sostenernos entre nosotros, apoyarnos para ir tomando fuerza y poder organizar la organización de la comisión, con todo lo que eso implica. La burocracia de los papeles, el poder presentarse a subsidios y demás.

ED: Ahí se produce la controversia sobre el tema de las bibliotecas. Cuando ustedes van a pedir la posibilidad de que les subsidien una persona en la biblioteca. ¿Puede ser?

LM: Si

ED: ¿Y que se aprobase una ordenanza al respecto?

 

LM: Si, las bibliotecas populares pueden recibir si están en condiciones, subsidios nacionales a través del ministerio de cultura, subsidios provinciales también y pudimos en ese año, creo que 2010, un subsidio a nivel municipal. Destinado a cierto uso, por supuesto. Y el problema que tienen las bibliotecas, hasta el día de hoy, es que ninguno de los subsidios les permiten el pago de personal para la atención en la biblioteca, entonces por ahí se hace muy difícil sostener una apertura diaria, porque siempre se termina haciendo con el trabajo voluntario de los distintos integrantes y es muy difícil de sostener, justamente.

Entonces lo que buscábamos en ese momento, era la manera de que el municipio pudiera aportar en ese sentido y solventar ese gasto en el personal.

ED: Lo claro es que el municipio dijo que no, no salió la ordenanza, y uno de los que tuvo que explicar el motivo de la decisión fue el Carlitos Alberti, que era concejal.

LM: Puede ser, no me acuerdo

ED: Y después terminaste en la misma tropa, con el Carlos. ¿Le faltó decisión política al municipio?

LM: No, no faltó decisión política, fue una decisión política. No aceptaron, justificaciones habían por demás para poder aceptar.

Nosotros dimos la discusión, planteamos todo lo que había que plantear y después recaía en una decisión política. Nosotros hicimos todo el caminito que había que hacer. También quizás eso nos dio el pie para trabajar cuestiones más políticas.

ED: ¿Ahí vos ya habías empezado la militancia en algún espacio político?

LM: Claro, de ahí surge la posibilidad de participar en la izquierda. Yo nunca participé de una lista, pero muchos de nuestros compañeros si y obviamente yo acompañaba, ayudábamos, hicimos campaña. La verdad que se hizo un laburo a pulmón y dio buenos resultados. Viéndolo ahora, quizás en ese momento habíamos perdido, era la posibilidad de ganar una banca, me acuerdo, y otras cosas pero aún así creo que fue una buena experiencia y también un laburo de mucho corazón.

ED: ¿en qué momento te diste cuenta que ya era momento de seguir en la búsqueda?

LM: Después de estas dos experiencias que tuvimos en la política partidaria, por decirlo así, empecé a querer aportar desde otro lugar.

ED: ¿Pensaste que ya había un techo?

LM: Si, o que quizás no era para mí. Al mismo tiempo ya me había recibido de profesor y ya tenía horas en San Miguel. Entonces mi trabajo empezó ahí en la escuela, más allá de la materia que daba, la docencia también es una herramienta política. Y ahí, a los años, me encuentro con el Carlos Alberti que ya era presidente del Concejo y me propone hacer en la escuela la sesión federalizada que ellos hacían. Lo organizamos y fue un éxito, porque nosotros invitamos a la comunidad y hubo muchísima participación, ahí empezamos a tener contacto, me acuerdo que iba todos los lunes a la oficina del Carlos Alberti a hablar cosas y bueno, me quise sumar a trabajar con ellos.

ED: Pero vos ya lo conocías…

LM: Si, estudiaba con el Pochi (Luis Tallura) Ciencias Políticas.

ED: ¿De qué año estamos hablando?

LM: No me acuerdo bien pero creo que 2016 o 17. Después de que me sumé a trabajar con ellos, en el año 2018 dejé la escuela por cuestiones personales. Ahí Carlos me propone trabajar con él en el Concejo y al año siguiente así fue. Primero como secretario de bloque, ahí me metí más de lleno y justo se vino una campaña intermedia, ahí trabajamos muchísimo.

ED: ¿Qué fue lo que te atrajo de ellos?

LM: Yo vi mucha coincidencia en la forma de trabajar, que yo traía de aquellos tiempos. Trabajar en equipo, tratar de consensuar y pelear por las ideas que uno tiene, que son bastante parecidas a las que yo tengo, y la posibilidad también de llevar adelante algunas ideas.

ED: ¿Y empezaste a ver ahí, que la estructura era más abierta y permeable a las propuestas que podías llegar a hacer?

LM: Si si, totalmente. Por eso también me sumé y aparte porque habían ideas o cosas que antes no las pensaba.

ED: Entre el 2016 y 2017 empezás a participar de lo que vendría a ser una de las políticas de estado más importantes del departamento, cuando Cornejo decide ponerle una cortina de hierro al departamento de Lavalle, no girarle fondos excepto para un par de obras y aparece lo del presupuesto participativo. ¿Puede ser?

LM: Si, cuando me sumo al trabajo de la juventud ya venían trabajando con el presupuesto. No laburaba en el municipio pero si era compañero de militancia de algunos chicos que lo llevaban adelante y por ahí acompañé en algunas actividades del presupuesto participativo. Una propuesta bastante interesante, creo dio buenos resultados.

ED: ¿Sentiste ahí, en ese trayecto, que ya empezaban a haber disputas al interior del municipio?

LM: No tanto como en este último tiempo, pero si era obvio que habían distintos grupos, aunque no se sentía que unos tiraban para un lado y otros para otros. Había diferencias pero más o menos todos desde su forma, digamos, tratando de tira para el mismo lado.

ED: Al venir de otro espacio, ¿te sentiste alguna vez sapo de otro pozo?

LM: Si pero por mí, por ahí no entendía algunas cuestiones. Me acuerdo en algunas juntadas de las juventudes, la horizontalidad no era algo que estaba tan claro, más bien la verticalidad. Siempre la búsqueda de un referente o una guía, que no me parece que esté mal tampoco porque por ahí es más operativo de alguna forma. Eso quizás me costó entenderlo al principio. Pero nunca nadie me hizo sentir así, al contrario, desde el minuto cero ya me sentí parte, aunque habíamos estado en lugares diferentes, porque teníamos las mismas ideas o similares. O será que a mí no me gustaba ser muy confrontativo.

ED: En ese sentido, más allá de que has estado en la biblioteca, vos has tenido otro perfil más diferente al de tu viejo. Sabiendo que él tenía un perfil mucho más alto, has tenido un perfil diferente al de tu viejo, ¿puede ser?

LM: Si

ED: No has sido muy confrontativo. Lo que no es obligatorio, pero el tema sería el contenido, digamos. ¿Qué propuestas te llamaron la atención?

LM: Yo creo mucho en esto de la sociedad organizada y la fortaleza que tiene eso, y a mí me preocupa por ahí, sobre todo con eta modernidad que tiene que ver mucho con las redes, lo individual, el perfil y demás. Lo que creo que nos quita esto de organizarnos con el vecino y ver cómo podemos solucionar la cuestión del barrio, del pueblo. Creo que el camino debería ser esto, fomentar y fortalecer la sociedad organizada, ya sea una biblioteca popular, unión vecinal o club social. Ese sería el desafío de mi propuesta.

ED: Esa batalla, que evidentemente es cultural, ¿está en disputa?

LM: Está difícil, porque también hay una vida difícil, una economía difícil para la familia.

ED: Si, pero las necesidades han existido siempre, y a veces ha habido más necesidades que ahora, y se han organizado más. Cuando nacieron los clubes de Lavalle por ejemplo no estaba todo resuelto…

LM: sí, pero la vida era diferente, hoy la gente necesita dos o tres laburos para sobrevivir.

ED: ¿Se ha hecho más cara la vida?

LM: Se ha hecho más cara, nos ha impuesto cosas que tenemos que tener si o si, y para tenerlas no nos queda otra que salir a buscar el mango a dónde sea. Pero a la vez veo, con Gimena, con la cantidad de entidades que ella ayuda a organizarse u organizar sus papeles, y cada vez surgen nuevas y eso te entusiasma, porque te muestra que no está perdida la batalla, y gente joven queriendo organizar su club, su unión vecinal.

ED: Te llevo al plano político. Vos a fin de año vas a cumplir dos años como concejal. ¿Qué papel te ves cumpliendo hacia adelante?

LM: claramente nosotros somos un sector dentro del peronismo, y el papel en lo personal que quisiera cumplir ahora es acompañar a los que ganaron. Seguir proponiendo lo que uno considera correcto. Tratar de encontrar la solución a través de las herramientas que tiene el municipio. Y esperar que en setiembre podamos darle una buena victoria al peronismo.

ED: ¿Creés que ha bajado mucho más la espuma?

LM: sí, sí, nadie quiere estar en una interna eterna. Los que más años tienen tal vez lo sienten más. Pero está claro que para nosotros lo mejor que puede pasar para Lavalle es que gane el peronismo.

ED: Y en eso, ¿está la idea de ir aceptando los nuevos liderazgos? Porque en eso hay que aceptar que Edgardo es el que tendrá el nuevo liderazgo.

LM: Por supuesto, está claro, que no significa que estemos de acuerdo en todo, pero es tratar de encontrar los espacios para poder proponer y llevar adelante lo que uno piensa.