Si bien Marolio perdió 100 ha de producción, debido a la tormenta que se desató en el mes de febrero, lo cierto es, que la temporada se ha mantenido estable dentro del panorama macroeconómico que se da en Argentina.

Sin embargo, esta empresa que en temporada emplea a 1.000 personas en su fábrica y que en forma permanente tiene 350 trabajadores registrados, debió resignar alrededor de 10 millones de kg de tomate en la presente temporada, debido a las inclemencias climáticas que se desataron con inusitada furia, sobre decenas de fincas de Lavalle, el pasado febrero.

Si bien, había preocupación en sectores de la población del departamento por la posibilidad de que la empresa despidiera gente, desde fuentes vinculadas a la misma, sostuvieron que en el caso de la finca, si bien la producción que se perdió fue importante para la empresa, 10 millones de kg de tomate, sobre una campaña de 145 millones de kg de tomate, planificadas para esta cosecha y producción, en el caso de las fincas Santa Bárbara y Santa María no significó despidos, sino una readecuación de la tareas post-tormenta. Tampoco despidos en la fábrica.

La otra preocupación estaba vinculada a la posibilidad de adelantar el final del ciclo. Esto también fue desmentido, ya que si bien la temporada podría terminan en una semana, fuentes extraoficiales vinculadas a la empresa, aseguraron que esto está dentro de los tiempos de la temporada.