El sistema educativo cambió muy notablemente, del pasado al presente, se volvió muy permisivo.
El docente está inactivo, por un programa incompleto, y el alumno es incorrecto por la pedagogía, que le permite, hoy en día cualquier falta de respeto.
Cualquier alumno le contesta a la maestra de grado, si la atención le ha llamado, su ira le manifiesta.Y lo que más me molesta, es la actitud inconsciente, de padres, de padres cual el presente yo no justifico, en vez de retarlo al chico, la retan a la docente. Y no entiendo la razón, que no comprendan que pasa, y sepan que en la casa, comienza la educación.
Hay que prestar atención, tenemos que estar seguros, que es un porvenir oscuro, nos acecha la clemencia, si se les arraiga la violencia, a los dueños del futuro.
Tampoco, tampoco estoy a favor de aquel autoritarismo, que volvía al maestro mismo como un verdugo, un celador, el niño sintió terror, de cualquier ultraje, y sin que nadie lo ataje, ahora lastima a sus compañeros, si antes fue malo el puntero, hoy lo es el libertinaje.
Como puede ser que lleve un arma un niño a la escuela, herir, producir secuelas, tanto sea graves o leves, que cualquiera lo compruebe, esto está mal, hay que buscarle un final, y terminar con los privilegios, o se volverán los colegios, una batalla campal. Con la sobreprotección que le da este sistema educativo, al ser tan permisivo, pierde toda la razón, con la falta de atención, y estando de culto ausente, con un proceder violento, no aprenden a leer y escribir, sino han podido aprender, lo que es buen comportamiento.
Reclama la sociedad, y mil proyectos sugieren, de que el maestro recupere, el respeto y la autoridad, de que actúe con libertad, al llamar la atención, mientras en esta nación, impere la burocracia, siempre será una falacia, la palabra educación.
Poniendo en conocimiento, a un puñado de docentes, que luchan en incansable misión, como valientes, para ganar el respeto del alumno, y alumno al docente, mi pregunta es ¿se llegará al final de esta lucha?
Yo pienso que profesionales como hay en la escuela Grosso, lo han de lograr, estos alumnos muy agradecidos están, por su paciencia y tolerancia, esperamos que se sigan embarrando en la cancha, para poder llegar a una misma igualdad, y el pueblo lavallino les dará en su momento, el reconocimiento, por ser un equipo de docentes muy capaz.