Las investigaciones propiciadas por la fiscal general de Estados Unidos, Loretta Lynch, y efectivizadas por el FBI con la colaboración de la policía suiza, prácticamente descabezaron la cúpula dirigencial del fútbol continental.
De hecho ya no queda ninguno de los diez presidentes sudamericanos que ejercian sus respectivos cargos en 2013. Se trata de Julio Grondona (Argentina, ya fallecido), José María Marín (Brasil), Rafael Esquivel (Venezuela), Carlos Chávez (Bolivia), Juan Ángel Napout (Paraguay), Luis Chiriboga (Ecuador), Manuel Burga (Perú), Luis Bedoya (Colombia), Sergio Jadue (Chile) y Sebastián Bauzá (Uruguay). De profesión escribano y ex periodista deportivo, Valdez ocupaba el puesto de vicepresidente del club uruguayo Rentistas y fue representante de la entidad ante la Asociación Uruguaya.
El directivo llegó a la presidencia de la AUF en forma imprevista en 2014, tras una polémica asamblea que provocó la salida de Bauzá, el único de los ex presidentes de federaciones nacionales que no fue acusado de corrupción El Comité Ejecutivo está integrado además por Luis Segura, de Argentina; Edwin Oviedo, de Perú; y Alejandro Domínguez, de Paraguay.