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14 de febrero de 2024

El municipio lavallino podría paralizar la obra pública para enfocarse en la contención social

  •   Por Franco D´Amelio
           

En diálogo con El Despertador Sebastián Oribe, secretario de Hacienda y Administración, explicó la compleja situación que atraviesa el Municipio y cuáles son los planes en un contexto económico adverso y cruzado por tensiones políticas entre Nación y las provincias.

La nueva gestión ha encontrado más pasivos de los esperados y apuntará a brindar apoyo social más que terminar el año con superávit.

En diálogo con El Despertador Sebastián Oribe, secretario de Hacienda y Administración, explicó la compleja situación que atraviesa el Municipio y cuáles son los planes en un contexto económico adverso y cruzado por tensiones políticas entre Nación y las provincias.

¿Una pesada herencia, pero del mismo partido?

La entrevista a Oribe inició por un punto “áspero”. Es que, cuando lo entrevistamos por primera vez en diciembre a poco de asumir él dijo que estaban trabajando para conocer cuál era el “pasivo exigible” que tenía la Municipalidad. En otras palabras, cuánto debía.

“Entre septiembre y diciembre hemos encontrado aproximadamente (pasivos) por unos $211.000.000, puede ser más o puede ser menos porque hemos ido desimputando todo lo que hemos podido. Este monto sólo en expedientes de compras”.

Sobre el tema de “desimputar” el funcionario explicó que a nivel administrativo existen tres grandes pasos: la imputación preventiva, la imputación definitiva y el devengado. La primera es simplemente el establecimiento de la intención de compra desde el Estado de algún bien o servicio.

“…Cosas que son innecesarias las hemos ido desimputando…de todas esas cosas había órdenes de compra por unos 90 millones, algunas cosas se hicieron a destiempo, había cosas que los proveedores ya las habían entregado y por más que sólo tuvieran una orden de compra tuvimos que reconocerlo porque no podemos dejar al comerciante rehén de esta situación…es como sacar fiado.

Pero de las cosas que aún no habían sido entregadas, se les dio de baja…”

Sin embargo, los problemas les siguen apareciendo a Oribe y su equipo. Es que ellos hicieron una revisión desde septiembre a diciembre, pero “salen deudas de otras compras que están los expedientes, pero no se han hecho las liquidaciones a los proveedores que son de agosto. Esas nos llovieron del cielo, porque ni siquiera las tenemos relevadas…tampoco tenemos tiempo de ponernos a hacer ese relevamiento administrativo, tenemos que resolver las cuestiones más urgentes.

Cuando llegamos hicimos un relevamiento de tres meses atrás, pero tampoco podemos ponernos a relevar medio año y siguen llegándonos deudas”.

Una de esas deudas fue por $45.000.000 con el Departamento General de Irrigación por derechos de riego de propiedades que tiene el Municipio y que, al parecer, llevaban tiempo sin ser abonados.

Cabe destacar que todo lo relatado hasta este punto se refiere sólo al Área de Compras y no abarca todo lo relativo a obra pública, donde el panorama es aún más complejo por las particularidades de ese ámbito.

A esto se suma que: “no hay una puerta dónde golpear en Buenos Aires porque ni siquiera están ocupados todos los cargos…los ministerios tienen cabezas, pero no tienen a nadie…” dijo Sebastián Oribe.

El peligro del sacar fiado del almacén

Algo muy típico en los negocios barriales y sobre todo en zonas de perfil rural como Lavalle es “sacar fiado” cosas de los almacenes donde el comprobante es una mera anotación en el cuadernito del quiosquero. En lo doméstico, si bien puede acumularse deuda de más, es relativamente fácil de manejar.

Pero cuando se trata del Estado usar esa lógica barrial puede traer problemas complejos.

Sobre esto, el secretario de Hacienda explica: “nos ha pasado de varios comerciantes locales que vienen a reclamarnos deudas…asumí yo y a los dos días me exigen deuda. Lamentablemente algunos tienen la documentación a medias, algunos completa y algunos casi no tienen documentación, ha habido mucho fiado y lamentablemente está desconocido por la gestión anterior.

Si a nosotros no nos figura un expediente y si la gestión anterior lo desconoció en el formulario 870 del Tribunal de Cuentas no hay mucho que podamos hacer. Salvo que tenga muchos elementos bien ordenados el comerciante, no podremos reconocerlo.

Nosotros no queremos desconocerlo porque sabemos que eran comerciantes activos como proveedores del Municipio, pero tampoco nosotros podemos hacer erogaciones sin tener las herramientas…estamos en una posición sumamente incómoda, nos exigen pagos, pero al no tener toda la documentación es complicado pagarlo”:

Es que, si se hace la erogación sin la documentación necesaria, luego serán ellos quienes deberán rendir cuentas ante los organismos de control provincial.

Cómo estamos de fondos

Al considerar todo lo anterior podría generarse una idea de que el estado de las cuentas es calamitoso, pero Oribe pone paños fríos sobre el tema: “con los fondos hemos mejorado…a nosotros nos dejaron unos 670 millones y a los pocos días estaba por acreditarse un pago de aproximadamente la mitad de esa cifra por coparticipación.

Gracias a eso y al ahorro que hemos generado con esta austeridad hemos logrado engrosar las cuentas, pero lo hemos hecho con la finalidad de cubrirnos para épocas de vacas flacas…lamentablemente con lo poquito que tenemos no podemos salir a hacer obras de asfalto u obras medianas a grandes porque nos quedamos de vuelta en cero”.

No tan malo como parece

Luego de que el gobierno nacional fracasara en su intento por aprobar la Ley de Bases (mejor conocida como “Ley ómnibus”) hubo lo que claramente pareciera ser una suerte de castigo o venganza para los gobernadores: se redujeron en un 98% los fondos discrecionales.

Estas son partidas que van por fuera de las “transferencias automáticas” como la coparticipación, sino que son erogaciones que, además de para “financiar recitales” como adujo el vocero presidencial, engrosan las partidas provinciales de educación, salud, seguridad, etc.

Si bien Sebastián Oribe reconoció que esto reducirá en general las inversiones provinciales en esas carteras, los servicios se seguirán prestando porque las partidas principales están. En cuanto al Departamento explicó: “mientras no se toque la coparticipación, no nos va a afectar de manera directa. Eran fondos Nación-Provincia, de eso tal vez algo llegaba a Lavalle, pero nosotros vivimos de la coparticipación…sí nos va a afectar si se reduce el consumo”.

ED: ¿Cómo apuntan a terminar el 2024 en términos financieros?

SO: “Los términos financieros en este momento no nos interesan mucho, porque terminar el año con 4 mil o 5 mil (millones) en caja, pero no haber resuelto los problemas más urgentes de la gente no tiene sentido. Vamos a poner el énfasis en ayudar a la gente, amortiguar la crisis que se viene y que se va a agudizar después del periodo de cosecha en abril-mayo y vamos a tener que salir a dar mucha ayuda… Más que dejar cuentas con miles de millones, nos interesa dar soluciones de fondo. Nos gustaría financieramente…poder renovar una gran parte del parque automotor de la Municipalidad sin necesidad de usar el crédito que nos aprobó el Honorable Concejo Deliberante.

Nosotros habiendo llegado a fin de año teniendo para pagar aguinaldo y cuatro o cinco partidas salariales más, renovando gran parte del parque automotor y habiéndole dado soluciones a la gente, ya para nosotros sería positivo…mucho más que haber dejado las cuentas más engrosadas, pero no haber hecho nada de lo anterior”.


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