Desde hace tiempo, el bloque de concejales peronistas viene crujiendo por diversos motivos. Entre ellos, porque no estaría convenciendo al grupo mayoritario del oficialismo, que en su momento quedó del lado de Righi, la marcha del gobierno municipal, mucho menos después del abrazo del Edgardo con Cornejo, (enemigo público número uno hasta hace un tiempo en Lavalle).

En ese sentido, no son pocos los rumores que sostienen, que este grupo de 4 concejales (Rivera, Mangione, Masoero y Quiroga) podría dar un portazo y armar bloque aparte.

Por ahora son presunciones, pero hay una admisión de parte de varios de estos concejales, que la situación parece no tener retorno.

Y es que este sector, aseguran, quiere decir cosas que hoy por no puede decir por una cuestión de lealtad partidaria.

La vieja máxima de Alem que tanto aplicó el radicalismo durante años, parece ahora calzar en los zapatos de todo el peronismo lavallino que naufraga sin liderazgo alguno a una implosión de características inusuales.