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El diario del Oasis Norte de Mendoza

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30 de enero de 2020

Las zonas productivas en peligro por el avance inmobiliario y la desidia oficial

  •   Por Juan Burba
           

En los últimos años el fenómeno mundial del avance de las urbes sobre terrenos productivos es una preocupación para (algunos) gobiernos y para diferentes sectores de la sociedad.

El Despertador entrevistó a Martín Pérez, geógrafo e investigador de la UNCuyo y especialista en Ordenamiento Territorial, sobre este proceso en el que ni Mendoza, ni Lavalle, son ajenas. «El problema más grande es que este crecimiento de las ciudades muchas veces se da en contraposición a las áreas donde se hace agricultura» afirmó Pérez, y continuó: «entonces las contradicción es: crecen las ciudades y ponemos en riesgo nuestra capacidad de producir alimentos». Explicó también que «en Mendoza se agrava porque nuestra capacidad (de cultivar) es limitada a donde hay posibilidad de tener agua, el riesgo de perder capacidad productiva es mucho mayor que en otras áreas».

Le consultamos sobre si la Ley y los Planes (provincial y municipales) de Ordenamiento Territorial apuntan a resolver este problema, a lo que el pesquisa respondió que «todavía nos falta bajar mucho a cuestiones más concretas, no es que los planes o la ley estén mal, nos falta encontrar instrumentos específicos concretos para poner en práctica lo que los planes dicen».

 

ED: ¿Y cómo se resuelve?

MP: no hay un sólo instrumento que logre ordenar el crecimiento habitacional, hay procesos económicos del tipo productivos, hay necesidad de hábitat, que no se resuelven con un sólo instrumento, la zonificación es un primer paso, donde el municipio puede definir los usos del suelo, pero no es la única, por eso es muy importante fomentar que la actividad agroproductiva no caiga, porque ante eso, es mucho mas fácil que se esas tierras «se urbanicen».

También consultamos sobre este tema a Nancy Griffone, Jefa de Ordenamiento Territorial (OT) de la comuna, que trabaja en el marco de la flamante Dirección de Desarrollo Territorial y Hábitat. Griffone explicó que «el avance urbano es sólo una de las problemáticas, que puede frenarse a través de la zonificación, la creación de la ordenanzas correspondientes, de los instrumentos económicos» pero reconoció que «la Ley es muy general, y no se han creado los instrumentos, legales económicos y administrativos para poder llevarla adelante» y cargó contra el ejecutivo provincial ya que dijo que estos instrumentos «no los deben crear los municipios, si no la provincia a través de la Agencia de Ordenamiento Territorial, y no lo ha hecho». El Consejo Provincial de OT, donde participan distintos actores (municipios, las instituciones de investigación, las universidades) vela porque la Agencia, es decir el ejecutivo, cumpla su función. «La Agencia está en funcionamiento de forma irregular y el Consejo directamente no está funcionando» explicó Griffone «entonces empezamos mal en el primer eslabón del cumplimiento de la Ley»

 

En nuestro departamento existe una Ordenanza (826/13) que data del 2013 en la cual se prohíbe, en tierras con derecho de riego, fraccionar superficies menores a 1 hectárea, con el objetivo de frenar loteos urbanos en tierras aptas para el cultivo. Martín Andrada, integrante del equipo de OT municipal explicó que la Ordenanza «es una de las herramientas fundamentales que tenemos, el asunto es cuando los loteos pasan por Catastro Provincial las empresas saltean al municipio, y generan las aprobaciones sin pasar por donde deben, entonces acá nos enteramos que está aprobado algo que no debería». Es decir que «puentean» a la Municipalidad para poder lotear y es por eso que, por ejemplo, todo el paisaje de la entrada a Villa Tulumaya, es decir la Ruta 34 (desde el cruce hasta la Villa), se está transformando en urbano.

Martín Pérez, el investigador de la UNCuyo, consultado sobre esto fue más optimista: «yo creo que esto se resuelve con una organización de la gestión del territorio en una articulación provincia – municipio, no creo que sea una cuestión insalvable, creo que muchos problemas ya se han ido salvando», aunque asumió que «la rentabilidad inmobiliaria tiene un grado tal que hace muy difícil que la rentabilidad agrícola pueda equipararlo» y reconoció que esto juega en contra del ordenamiento.

Y la cosa en Lavalle está que avanza. Sobre los tiempos para frenar estas embestidas Griffone explicó que el Plan Municipal de OT no tiene una zonificación actualizada y data de 1992 «y no quisimos poner una zonificación realizada a las apuradas porque nos parece una herramienta fundamental». Aclaró también que «luego de la aprobación del Plan (Municipal de OT) en agosto del año pasado nos hemos puesto a trabajar en la zonificación y en los cambios de los códigos de usos del suelo… que es una de las herramientas que va a frenar el avance urbano y que va a proteger las zonas productivas del departamento». Consultada la funcionaria sobre cuándo va a ocurrir esto aclaró que, tanto los nuevos códigos de uso de suelo, como la zonificación, deberían estar listos este año.

Sobre la importancia de la Agricultura Familiar en el proceso de producción de alimentos el geógrafo de la UNCuyo afirmó que: «nuestra producción en el Oasis Norte, en un 70 u 80%, tiene que ver con el pequeño productor familiar, por lo tanto es un actor fundamental». Argumentó también que «el debate no es dónde se puede urbanizar y dónde no, sino donde pensamos que la actividad agrícola deba desarrollarse, por qué camino, con qué actores y de qué manera». Marcó que «otro desafío, en la zona cercana a las ciudades, es producir de una manera más amigable con el ambiente, con buenas prácticas agrícolas, con el uso regulado de agroquímicos, e incluso, de productores que puedan trabajar de manera agroecológica».

Afirmó que hay que buscar «otros mecanismos para que la producción se revalorice, y se revaloricen esos suelos productivos… hay zonas que no podemos darnos el lujo de perderlas, por sus características edafológicas (buenos suelos) e hídricas».


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