Luego de las críticas de las últimas dos semanas, donde grupos de personas se terminaron organizando por whatsapp reuniones, reclamos y hasta cortes, Edgardo logró sentar a la mesa al gran responsable del fracaso de los últimos tiempos del transporte en Lavalle. ¿Podrá convencerlo de la necesidad de resolver el problema que el propio funcionario dejó profundizar? Sin embargo, la reunión no será en Lavalle, sino en Mendoza.

Cinco años después de vencida la licitación, el día martes más precisamente, Edgardo González se sentará con Natalio Mema, ministro de gobierno, infraestructura y desarrollo Territorial de Cornejo, que anteriormente había actuado como ministro de servicios públicos tanto de Cornejo, en el primer gobierno, como de Rodolfo Suárez.

A sus recién cumplidos 38 años, Mema tiene muchos años recorridos en el tema transporte por lo que es la palabra totalmente autorizada para, no sólo hablar del tema, sino resolverlo.

Jaque, el artífice

Fue Celso Jaque, junto con Righi, que luego de mucho batallar, pusieron la licitación como piedra angular del servicio. Corría diciembre de 2008, y precisamente Prestaciones se quedaba con el mismo. (ver reseña).

La licitación duraba diez años, y los primeros fueron más que auspiciosos para los pasajeros. Más frecuencias en la zona núcleo, Villa y Costa, unidades completamente renovadas, (me quedo con las viejitas que tenían asientos cómodos de cuero), mayor cantidad de unidades, eran la parte sumamente positiva de la adjudicación. Viejas deudas seguían en pie, La baja cantidad de frecuencias a las zonas rurales y la casi inexistente a la zona del secano, pero al menos, si todo marchaba bien, la posibilidad de mejorar podría ser segura.

Sin embargo, los primeros cinco años de virtuosismo del transporte renovado fueron dando de forma lenta pero constante de la falta de cumplimiento de los recorridos, el deterioro de las unidades, y algunas como la falta de cumplimiento de rampas para personas con discapacidad, que se sumaron a las tradicionales deficiencias de origen de la licitación. El Despertador fue testigo excluyente de todas ellas como ningún medio.

Diez años después, todo el mundo esperaba por una licitación que pusiera blanco sobre negro el sistema de transporte en el departamento. Habían quedado atrás, decenas de reclamos del Concejo Deliberante de Lavalle encabezado por Carlos Alberti con cientos de quejas de vecinos y vecinas del departamento. Nobleza obliga a decir que de ese Concejo, merced a ese constante reclamo, se consiguieron tres frecuencias para zonas rurales. Algo era algo.

Sin embargo, la licitación nunca llegó. Y la solución tampoco. Por supuesto en Mendoza la situación era distinta. Subsidios diferentes. Mendotran, Metrotranvía eran la contracara de la escena lavallina. Cientos de millones de pesos invertidos en el Gran Mendoza, y ni siquiera el más mínimo interés en escuchar propuestas en las zonas distantes. El drama de esta manera no era solo de Lavalle. El resto de los distritos alejados se reflejaban casi como un espejo en el drama de nuestro departamento.

La caída de uno de los subsidios, el cambio de fórmula que beneficia al transporte de corta distancia, la crisis nacional de 2018 y 2019, la pandemia del 2020, la salida de la pandemia en 2021, la post pandemia en el 2022, las elecciones de Luján de donde Mema era candidato a intendente en el 2023, fueron parte de los argumentos nunca esgrimidos, para no prestar atención al drama del transporte en el departamento. Y es que claro, 45.000 personas en Lavalle y algunos cientos en El Borbollón no hacían la diferencia.

Cinco años después y luego de miles de reclamos, incontables notas periodísticas en medios locales y populares, Mema parece haberse dignado a venir. Está claro, que no lo hace de motus propio, fue acicateado por algún otro funcionario político, sino el mismo Cornejo para sentarse a la mesa común. Y por supuesto, Edgardo movió la varita para articular todo eso.

En el caso de Mema, tanto tiempo como funcionario, tantas funciones y tanta juventud deben significar algo. Tal vez mucho.

Sin embargo, que nadie se confíe, permanecer y transcurrir no significa honrar el cargo.

El tiempo dirá…